domingo, 2 de junio de 2013

Giuseppe Penone

En el post de hoy os quiero hablar de un artista italiano al que descubrí hace poco en una exposición en la galería londinense Whitechapel, muestra que permanecerá abierta hasta el mes de agosto.

Giuseppe Penone (Garessio, 1947). Es un artista italiano, hijo de campesinos y vinculado desde su infancia con el mundo de la naturaleza, se le ha relacionado desde sus primeras obras con el movimiento del arte povera. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Turín, donde conoció a Michelangelo Pisoletto y a Giovanni Anselmo quienes le introdujeron en la corriente povera. Posteriormente decidió volver a su pueblo natal donde abandonó los materiales comunes de la escultura, para trabajar directamente con los árboles y la naturaleza, materias primas relacionadas más con la artesanía que con el mundo del arte.

Giuseppe Penone en pleno proceso creativo

Para Penone es esencial a la hora de llevar a cabo sus obras la relación que existe entre la naturaleza y el ser humano, especialmente entre los árboles y el hombre. Investiga la interacción existente entre ellos, profundizando en cómo el ser humano la modifica constantemente. A pesar de que sus esculturas son sus obras más famosas, debido también a la momumentalidad de las mismas, su  trabajo no se limita a éstas y también realiza dibujos, performances en los bosques cercanos a su casa, y obras  de body art en las que usa su propio cuerpo.

Young Tree Carved Inside Old Tree

En cuanto a sus esculturas, trabaja directamente con la corteza y la madera de los árboles, hasta convertirlos en una obra en sí. La interacción del espectador con sus creaciones es un punto que valora mucho también a la hora de realizarlas. Éstas no son unas obras que se separen del espectador sino que éste debe acercarse y descubrir la transformación que se ha llevado a cabo en las mismas.

Spazio di Luce

La obra principal de la exposición que se puede ver en la Whitechapel, es un tronco de árbol modificado por Penone y convertido en una verdadera escultura. El interior está recubierto de una capa dorada, que nos remite al valor del árbol, comparándolo con cualquier joya valiosa. Además el artista juega hábilmente con la percepción del espectador ya que la escultura tiene diferentes visiones que el receptor va descubriendo según rodea la misma. Al final de la obra se puede mirar a modo de catalejo a través de la misma, desde su punto más extremo, descubriendo una figura circular dorada, una especie de caracol de oro, que nos sorprende al mostrarnos esta nueva visión que se esconde en el corazón del árbol.
                                                                                                Spazio di Luce

1 comentario:

  1. Anónimo3/6/13

    Me encata tu blog Carmen!! Me gustó el articulo y me acercaré a la Whitechapel Gallery.

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